- El reciclaje de plástico se ha convertido en una de las herramientas más efectivas para mitigar los efectos del consumo masivo de este material
Teorema Ambiental/Redacción
La responsabilidad ambiental se ha convertido en un eje central para los negocios, en especial para el consumidor, priorizando a las empresas sustentables. En el marco del Día de la Conciencia Ambiental, conmemorado este domingo 29 de septiembre, quedó de manifiesto que la sinergia entre la sociedad y las empresas de reciclaje de plástico es fundamental para generar una conciencia ambiental efectiva.
En México, Centroamérica y el Caribe, la gestión adecuada de residuos plásticos cobra una relevancia crucial debido al volumen de desechos que generan estos países. Según datos de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (ANIPAC), en México se recicla solo el 25 por ciento de los plásticos posconsumo, lo que refleja el enorme potencial de crecimiento en la industria del reciclaje. Al aumentar esta tasa, no solo se reduce la cantidad de residuos en vertederos y océanos, también se generan importantes beneficios económicos, incluyendo la creación de empleos locales.
Dentro de los esfuerzos para generar una conciencia ambiental, ALPLA continúa posicionándose como un actor clave en la promoción de un futuro más verde y limpio, al reafirmar su compromiso con la sostenibilidad, destacando los beneficios y el impacto positivo del reciclaje de plásticos en la protección y concientización del medioambiente.
Cada día, 54 millones de personas en México, Centroamérica y el Caribe utilizan productos de ALPLA, ya sea en una botella de agua, un refresco, un envase de champú o de detergente, entre muchos otros. Por ello, el reciclaje de plástico se ha convertido en una de las herramientas más efectivas para mitigar los efectos del consumo masivo de este material, además de reducir la huella de carbono y disminuir la dependencia de recursos vírgenes.
“Cada tonelada de plástico reciclado ahorra hasta un 80 por ciento de energía en comparación con la producción de plásticos nuevos”, afirmó Carlos Torres Ballesteros, director general de ALPLA para México, Centroamérica y el Caribe. “Nuestro compromiso es claro, crear envases que no solo sean útiles y accesibles, sino que también promuevan una economía circular y contribuyan a un mundo más sostenible.”
El reciclaje de plástico no solo reduce residuos y preserva los ecosistemas, sino que también impulsa importantes beneficios económicos. ALPLA refuerza este compromiso con sus dos plantas de reciclaje en México, donde se procesan 50 000 toneladas de PET posconsumo cada año. Este esfuerzo no solo fortalece la economía circular, sino que también contribuye al empleo en la región de México, Centroamérica y el Caribe, donde la empresa cuenta con 3562 colaboradores, de los cuales 578 están dedicados a la división de reciclado. Estos números reflejan el firme compromiso que tienen con la sostenibilidad y el desarrollo económico en la región, además de ayudar a reducir la emisión de gases de efecto invernadero, lo que contribuye a mitigar el cambio climático.
Estas plantas permiten que los residuos plásticos recolectados sean transformados en resinas recicladas de alta calidad, las cuales son utilizadas para producir nuevos envases. Este proceso no solo reduce la cantidad de plástico que llega a vertederos y océanos, también cierra el ciclo de vida de los productos plásticos, evitando el uso excesivo de materiales vírgenes.
“Creemos que la conciencia ambiental debe estar presente en cada etapa del proceso productivo. Desde el diseño hasta la fabricación y reciclaje, buscamos que nuestros productos no solo satisfagan las necesidades de los consumidores, sino que también contribuyan a un entorno más limpio y saludable para las futuras generaciones”, enfatizó Carlos Torres.
Fotografía: ALPLA
