Cambio climático

CCA se suma a los esfuerzos para mejorar la calidad del aire y justicia ambiental en Norteamérica

  • Desde 2022, la CCA ha trabajado en forjar alianzas de colaboración con comunidades de Canadá, EE. UU. y México afectadas directamente por la contaminación atmosférica

Teorema Ambiental/Redacción

Según datos de la ONU, el 99 por ciento de las personas respiramos aire contaminado todos los días, provocando graves problemas a la salud y al medioambiente. Por ello, la ONU calificó esta emergencia oculta como el “mayor riesgo para la salud atribuible a las condiciones ambientales de nuestro tiempo”. Prestar apoyo a las comunidades para atender la calidad del aire constituye un asunto de carácter urgente que puede ayudar a millones de personas a mejorar su bienestar general.

Por ello, hay iniciativas que destacan la importancia de invertir en las comunidades y ponen énfasis en la necesidad de establecer alianzas y asociaciones más sólidas, aumentar la inversión y fomentar el sentido de responsabilidad compartida para combatir la contaminación atmosférica. Por ello, organismos como la Comisión para la Cooperación Ambiental de Norteamérica (CCA) en alianza con la Oficina de ONU Medio Ambiente en América del Norte, y a muchas otras organizaciones, buscan generar mayor conciencia sobre la calidad del aire y el valor de trabajar con las comunidades y establecer alianzas y relaciones de colaboración en las tareas de monitoreo y mejoramiento de la calidad del aire.

Calidad del aire y justicia ambiental

Como parte de su iniciativa Mejoramiento de la calidad del aire en pro de la justicia ambiental, la CCA anunció que, desde 2022 ha trabajado con miras a forjar alianzas de colaboración con comunidades de Canadá, Estados Unidos y México afectadas en forma directa por la contaminación atmosférica.

Se trata de comunidades que requieren un mejor monitoreo de la calidad del aire y cuentan con el interés para emprender medidas al respecto en el ámbito local. Estos esfuerzos se han centrado de manera concreta en uno de los componentes de las partículas de materia PM2.5: el carbono negro u hollín, resultante de la combustión de biomasa y combustibles fósiles, con numerosos efectos nocivos para la salud humana y el medioambiente, pero que rara vez es objeto de la mayor parte de las acciones de monitoreo.

El trabajo trinacional que realizan en materia de calidad del aire en pro de la justicia ambiental les ha permitido identificar oportunidades de colaboración y trabajo conjunto, así como facilitar y formalizar acuerdos al respecto, con comunidades y organizaciones en los tres países interesadas en medir la calidad del aire de su localidad y administrar sus propias redes comunitarias para tal efecto.

Actualmente participan en el proyecto de la CCA: la Primera Nación Aamjiwnaang (Canadá), la organización Comité Cívico del Valle (Estados Unidos) y la Fundación Tosepan (México), con las que nos sentimos muy honrados de poder colaborar en favor del mejoramiento de la calidad del aire de sus comunidades.

Las fuentes y prioridades en cuanto a problemas de calidad del aire difieren de una comunidad a otra: en los casos de Canadá y Estados Unidos, las comunidades participantes viven en ciudades fronterizas y las fuentes industriales y de transporte ocupan un lugar prioritario, con presencia a gran escala de las industrias petroquímica (Sarnia, Ontario) y agrícola (Valle Imperial, California).

En el caso de México, la labor se desarrolla en territorio de la Sierra Norte de Puebla, donde la quema de leña para cocinar es una de las principales fuentes de contaminación del aire ambiente, fuente que históricamente ha sido poco evaluada en el país en términos de monitoreo atmosférico a largo plazo.

Cada una de estas tres iniciativas comunitarias gestionará su propio proyecto de monitoreo, con prioridades y objetivos definidos localmente, y sinergias con otros esfuerzos locales en materia de calidad del aire, a fin de medir y mitigar las emisiones de PM2.5 y carbono negro, así como reducir la exposición a estos contaminantes atmosféricos. La colaboración con la CCA facilitará el desarrollo de capacidades técnicas para utilizar monitores de carbono negro y equipo meteorológico (este último en Estados Unidos y México).

Fotografía: pxhere.com

Suscríbete al Boletín

PAÍSES QUE NOS ESTÁN VIENDO