La Profepa aseguró al leopardo debido a que el dueño no acreditó la legal procedencia del ejemplar y por detectarse faltas al trato digno y respetuoso hacia éste
México, D.F.— Debido a una denuncia ciudadana, personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó una visita de inspección en un domicilio particular del Fraccionamiento Valle Escondido, en el municipio de Atizapán de Zaragoza, Estado de México, donde encontró un leopardo negro de aproximadamente nueve años de edad.
La Profepa aseguró al leopardo debido a que el dueño no acreditó la legal procedencia del ejemplar y por detectarse faltas al trato digno y respetuoso hacia éste.
El poseedor no contaba con las instalaciones óptimas para el cuidado y manutención del felino, el cual no tenía el sistema de marcaje que la Ley General de Vida Silvestre establece como obligatorio para acreditar la legal procedencia.
Además se detectó que el leopardo tenía una herida en una de las extremidades sin que su poseedor acreditara su atención médica.
Asimismo, el responsable no presentó el Plan de Manejo requerido por la Ley General de Vida Silvestre para la posesión de este tipo de ejemplares, cuya autorización emite la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a fin de demostrar y garantizar que se cuenta con las instalaciones adecuadas, la alimentación necesaria y los cuidados médicos pertinentes.
La Subprocuraduría de Recursos Naturales informó que debido a estos incumplimientos, inspectores de la Profepa aseguraron al ejemplar y lo trasladaron a una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre donde se le brindará atención inmediata y los cuidados necesarios para su bienestar.
Cabe destacar que la especie Panthera pardus se distribuye de forma natural en África y Asia; en México es considerada una especie exótica y su posesión está regulada por la legislación ambiental nacional.
Fuente: Teorema Ambiental