Científicos australianos consideran la posibilidad de establecer colonias de demonios de Tasmania en casi la mitad de su población.
Estos animales son los mayores marsupios carnívoros del mundo y sólo viven en la isla que les da nombre, en el sur de Australia.
Se cree que se extinguieron en Australia continental hace unos 600 años.
El nombre de demonios se lo deben a los colonizadores europeos, quienes los llamaron así debido a su pelaje negro, su mal humor y sus gritos aterradores.
Desde hace una década se ha estado propagando gradualmente una misteriosa enfermedad, surgida en la remota costa nororiental de Tasmania, que les devora el rostro.
Se cree que este cáncer se transmite durante su apareamiento, que puede ser una experiencia ruidosa y con muchas mordidas.
Como el tumor se desarrolla en la boca, los animales no pueden comer y se mueren de hambre.
Uno de los planes es establecer una colonia de demonios saludables en la vecina isla María, un antiguo asentamiento de ex presidiarios europeos.
También se podría llevar animales sanos a otras islas y penínsulas aisladas.
El catedrático Hamish McCallum, de la Universidad de Tasmania, explicó que esos refugios podrían desempeñar un papel clave, a largo plazo, para la supervivencia de los demonios.
“Espero que podamos por lo menos establecer poblaciones sanas”, señaló.
“Si pasara lo peor y perdiéramos toda la población de Tasmania, cuando los animales estén extintos con ellos se habrá extinguido la enfermedad, ya que no hay indicios de que pase a otras especies.”
“Entonces podríamos tratar de volver a introducir demonios a Tasmania.”
Los científicos también están estudiando el sistema inmunológico de los animales para ver si se puede desarrollar una vacuna.
Fuente: BBC