La naturaleza ha tenido que lidiar con niveles drásticos de carbono en la atmósfera antes de nuestra era, tal ha sido el propósito de la fotosíntesis
Finca Luna Nueva, Costa Rica.— Con el objetivo de reflexionar sobre las técnicas de producción y calidad de alimentos, la adaptación hacia los cambios climáticos y el impacto económico en los campesinos, compañías y gobiernos, se realiza la Conferencia de Regeneración Internacional.
Esta conferencia que será la primera de una serie de encuentros similares alrededor del mundo, se enfocará en unificar movimientos, desarrollar campañas y crear un plan global de medios para comunicar un mensaje urgente: la degradación del suelo amenaza tanto nuestro suplemento alimenticio como el clima; restaurar la salud del suelo puede revertir este daño.
Un informe publicado recientemente por la ONU, el Banco Mundial, el Instituto Rodale y gobiernos de países como Estados Unidos y China, entre otros, demuestra que la agricultura industrial, por medio del uso de químicos y la labranza, mata a trillones de organismos que dependen del carbono y que son necesarios para mantener la salud del suelo.
“La naturaleza ha tenido que lidiar con niveles de carbono mucho peores en la atmósfera antes de nuestra era. Tal ha sido el propósito de la fotosíntesis. Pero la tierra degradada ha anulado este proceso, atrapando así el carbono en la atmósfera y afectando el clima”, afirmó Larry Kopald, de la organización The Carbon Underground.
Diferentes reportes también demuestran cómo la agricultura regenerativa y las técnicas ganaderas pueden restaurar los suelos y producir también un rendimiento similar al de las técnicas industriales, creando así una mejor y mayor seguridad alimentaria. Además de esto, un suelo saludable puede reducir la cantidad necesaria de agua para cultivo en hasta un 60 por ciento.
“Que el suelo sea la parte central de nuestra conciencia y planeamiento es vital no sólo para la vida del suelo, sino también para el futuro de nuestra sociedad. La agricultura regenerativa da respuesta a la crisis de nuestro suelo, la crisis alimenticia, la crisis de salud, la crisis climática y la crisis de la democracia”, afirma Vandana Shiva, activista global y autora del libro Soil Not Oil.
“Esta es nueva ciencia que está conectando alimento y clima, y es cada vez más claro que al arreglar el suelo y la manera en que producimos nuestros alimentos, también podemos dar solución al clima”, afirma Ronnie Cummins, director internacional de la Organic Consumers Association.